Hace un par de semanas tuve la suerte de formar parte de un evento por la empleabilidad en Oviedo, promovido por empleOviedo, el Ayuntamiento de Oviedo y La Nueva Ruta del Empleo.

Fue un día lleno de emociones y nervios, de poner cara a muchas personas que conoces a través de las redes, lo que llamamos desvirtualizar, pues eso, que me pasé la mañana desvirtualizando. Fue una jornada intensa compartida con compañeros y profesionales del sector, con instituciones públicas y políticos, pero sobre todo con personas en desempleo.

Me encontré con miradas llenas de sorpresa e ilusión, de grupos de jóvenes estudiantes que se enfrentan por primera vez al tema del empleo, aunque sea a través de una jornada dinámica sobre cómo superar una entrevista de trabajo.

Me crucé con personas cargadas de esperanza de encontrar nuevos horizontes laborales, mejores que en el que se mueven actualmente y sabiendo que algo bueno les espera a la vuelta de la esquina.

Y también me tropecé con personas que caminaban mirando al suelo, a sus pies y me costaba ver su expresión. La intuía, pero no la veía con exactitud. Esas fueron las personas que más me interesaron, esas eran las auténticas protagonistas del evento, al menos, para mí.

Te hablo de los “parados de larga duración”, de las personas que llevan meses, años sin trabajar. Te hablo de aquellos que han perdido el control de su vida, de los que sienten que ya no sirven para nada, de los que sienten que sólo dan tumbos de aquí para allá sin sentido. Esos fueron mi verdadero objetivo.

Hablé con más de uno y de dos, si me apuras, pero me gustaría compartir contigo en especial la conversación que mantuve con uno de ellos en la terraza del Calatrava. Se trata de un hombre, con estudios universitarios que llevaba trabajando toda su vida profesional en lo que le gusta, en una empresa familiar haciendo lo que mejor sabe hacer. Y circunstancias de la crisis, la cual su empresa no pudo superar, lleva un año sin trabajar. Se emociona al contarme que es el “aniversario” de su paro, que hace un año que no trabaja y que no sabe cómo salir de esa situación.

Llora al admitir que no le falta el dinero, todavía le queda un año más de paro, tiene recursos y apoyo emocional para superarlo… pero aún así, se siente tan inútil… Ya no vale para nada y siente que nunca volverá a conseguir otra oportunidad, porque él es lo que es su trabajo y su trabajo ya no existe. Comprendo sus lágrimas, le abrazo y consuelo como puedo, porque cuando crees haber perdido una parte de tí, supone un duelo más. Y aquel hombre, estaba en pleno proceso de duelo por lo que fue.

Abraza su carpeta llena de papeles con anotaciones esperanzadoras recogidas durante toda la jornada y se va, balanceándose lentamente. Y mientras se aleja, veo como mira de nuevo hacia el suelo, en busca lo que ha perdido.

La situación de desempleo hace mucho más daño de lo que te imaginas. Rápidamente piensas en el dinero, en el día a día, en subsistir, y es normal porque hay prioridades que determinan tus necesidades. Pero más allá de conseguir pagar una hipoteca o un alquiler donde vivir, y tener una nevera que no dé pena al abrirla, también hay otros aspectos importantes a tener en cuenta en el desempleo.

Cuando llevas mucho tiempo sin empleo, te vuelves más frágil e inseguro. Tu imagen, tu autoconcepto se desvanece ya que has perdido parte de tu esencia con el trabajo que desempeñabas. Cuando trabajas, eres algo más que una nómina o un número, te transformas en compañero, en jefe, en auxiliar, en ayudante y haces cosas, sirves para algo, eres productivo y aportas, por poco que te pueda parecer en muchas ocasiones. Pero cuando no trabajas, pierdes todos esos roles, dejas de ser todas esas cosas que eres y haces cuando trabajas.

Además, la sociedad, los que te rodeamos, te hacemos sentirte mal, con miradas de desdén y reprobación, pareciese que no trabajas porque no quieres. Te sientes mal por sentirte una carga para esa misma sociedad, ya sean tus padres, tu pareja o tus amigos, y todos sabemos que sentirse una carga no mola para nada.

Cuando estás ocupado, lo estás a nivel laboral y a todos los niveles, es una rueda en la que entras y la que, a pesar de las dificultades del mundo laboral, te gusta estar, nos gusta estar. Porque eres valorado por lo que haces, por la empresa a la que perteneces, por la categoría por la que cobras y por la que cotizas, y eso es objetivo, ¿a ver quién te discute eso a tí? Pero ¿cómo se valora las horas que miras ofertas de trabajo en las webs o las que te pateas polígonos con tu cv en mano? ¿Y todos los networking o charlas a las que has ido? A eso, no se le da el mismo valor, seamos sinceros, por eso lloras y piensas que ya no vales para nada, pero no es así.

Yo te aseguro que vales, y mucho, desde el mismo momento que vienes a este evento con una carpeta en la mano y te pasas la mañana de sala en sala buscando ideas y caras conocidas, desde el instante en que me saludas y me recuerdas que sigues en la misma situación que hace un año y que no lo llevas bien. Vales muchísimo porque no te cuesta emocionarte y llorar conmigo, porque te sientes un pelele en manos del destino y un tanto egoísta por saber hay personas que lo están pasando mucho peor. Vales mucho a pesar de necesitar la permanente valoración y apoyo de quienes te rodean, incluso siendo dañinas en muchas ocasiones, las necesitas, porque te importa tu gente. Créeme, vales mucho… Porque todo esto por lo que te digo que vales, es lo que te hace ser tú y eso no desaparece con los puestos que hayas ocupado o vendrá con los que vayas ocupar, todo esto que yo valoro es lo que eres, y depende única y exclusivamente de tí.

No permitas que el desempleo haga más daños de los imprescindibles, ya son suficientes. Eres mucho más que lo que fuiste algún día ocupando una silla en un despacho, no lo olvides.

Fuente de la foto: pixabay.com

48 comentarios
  1. Susana ( la Fantástica Antoñita)
    Susana ( la Fantástica Antoñita) Dice:

    Hola Jessica, encantada de hablar contigo desde tu blog. Podría decirte mucho sobre este tema. Llevo varios años sin trabajar. Con la crisis me fui a la ruina económica. Podría devirycho sobre el tema. Para mí, perder el rol de empresaria y trabajadora por cuenta ajena supuso, la ruina económica, pero también supuso un cambio radical de entender el mundo, las prioridades y de conocer quién era yo. Cobro un subsidio de 329 euros con los que me estoy costeando la certificación en la Escuela Europea de Líderes. Nunca habría imaginado que el caos que se vivió a partir del 2008 me llevaría por estos derroteros. Y sí, necesito trabajar. Sólo cuestión de dinero. Porque tengo mucho que pagar y porque quiero salir de la casa familiar. Por todo eso. ¿realizada? Me siento realizada cuando escribo y me dais feedback y os resuena lo que puedo manifestar. Al principio me sentí fracasada cuando lo perdí todo, pero me descubrí, mira por dónde. No tenía ni idea de quién era. Gracias por tanto. Abrazos

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Susana! Un placer para mí tenerte por aquí también. Lo primero agradecerte tanto a tí, tus reflexiones en Facebook, me hacen tanta gracia como me hacen pensar. La crisis económica es solamente un tipo de crisis más, las hay existenciales, de valores, ideológicas, y son necesarias para avanzar, pero no pueden ser eternas. Las crisis son agotadoras, como lo son estas situaciones de las que hablo, pero tienen su misión y es hacernos mejores, hacernos llegar a donde tú has llegado, pero es tan duro que cuanto más se alarga, más cuesta ver el final. Tú ya lo has visto, con tu sufrimiento y esfuerzo de por medio, pero hay muchas personas perdidas en ese limbo. Eres una afortunada! Otro abrazo enorme!

      Responder
    • Byron Morales
      Byron Morales Dice:

      Hola Susy un gusto desde Guatemala.. Ahora estoy desempleado y te das cuenta de muchas cosas lindas de la vida. Saludos Byron Morales

      Responder
  2. GUILLERMO
    GUILLERMO Dice:

    Desde el sentimiento de otro desempleado mayor de 55 (exactamente 58) y con casi 9 meses de parado el levantarse cada día y enfrentarte al silencio, a los envíos de CVs sin respuesta, al frío e impersonal mercado laboral virtual UN ENORME ABRAZO A TODOS LOS QUE COMO ESE OVETENSE Y OTROS MUCHOS CIENTOS DE MILES NOS ENCONTRAMOS TRANSITANDO ESTE DURO Y ÁSPERO CAMINO Y DEJAROS UNA PETICIÓN QUE NUNCA NADA NI NADIE BORRE VUESTRA SONRISA DEL ROSTRO !!!

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Guillermo, estoy segura de que aparte de tener 58 años, ser de Oviedo y estar en situación de desempleo, eres otras muchas cosas. No lo olvides, al igual que pides que mantengamos la sonrisa siempre. Un abrazo enorme y mil gracias por aportar tu visión, experiencia y energía.

      Responder
  3. Eva Olive Sales
    Eva Olive Sales Dice:

    Hola Jessica, acabo de leer tu entrada y me ha gustado mucho. Para la sociedad, también soy una parada de larga duración… Pero para mi, soy la que despidieron, la que tocó fondo y se convirtió en un mueble más de casa, la que se dio cuenta de que no podía seguir así, la que decidió reinventarse y estudiar coaching y la que, a día de hoy, sigue luchando para vivir de esto que he descubierto me apasiona.
    Hay situaciones muy duras, quedarse sin empleo es una de ellas, pero también, una gran oportunidad si la quieres aprovechar. No la dejéis pasar, hay vida más allá del paro, ¡Palabrita!

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Eva, me alegra saber que te ha gustado. Mientras la valoración hacia tí misma como «mueble» sea en pasado, todo normal. Me quedo con la otra parte de tu aportación: con la buscar y crear nuevos escenarios, la de saber que la vida es dura e injusta, en muchas ocasiones, pero a la que hay que saber sacar partido. Me gusta que nos ayudes a ver que hay vida más allá de quedarse sin empleo. Un aplauso por tí y un abrazo muy fuerte. Gracias por compartir con tu experiencia.

      Responder
  4. Miguel Ángel García
    Miguel Ángel García Dice:

    Enhorabuena Jessica. Has dado en el clavo al reflejar la realidad del desempleo y de cómo hunde y afecta drásticamente a las personas. Por desgracia, casi todos hemos pasado por esa dramática etapa de la que no es fácil salir. Primero porque tu autoestima casi desaparece como muy bien reflejas en el post, segundo porque te haces «invisible» para la sociedad como tan bien retrata Ximo Salas en su recomendable novela «Dulce Crisis». Como digo yo, en tu entorno sólo quedan las personas que realmente te quieren y que te ayudarán a «recomponerte» como persona. Y tercero porque intentas volver a tu rol profesional y te comparas con tu antiguo puesto, cuando en realidad lo que tenemos que hacer es encontrar sentido a nuestras vidas (muchas veces hacíamos un trabajo alimenticio que no nos gustaba) y dar valor y soluciones a nuestro desempeño profesional, bien reinventándonos, bien formándonos en a nivel académico y en habilidades sociales.
    Un post magistral. Un abrazo.

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Miguel Angel, muchísimas gracias por tu comentario. No sé por dónde empezar a agradecer… Dar en el clavo es sumamente difícil, pero las emociones vinculadas a la pérdida de autoestima son universales, tan sólo es cuestión de escucharlas. Ponerme al lado de Ximo Salas, aunque solo sea en un comentario, ya supone un subido y para remate, definir el post como magistral, algo que sólo es superado por la referencia a esos «trabajos alimenticios» de los que hablan. Y sí, esta situación que vivimos también se alarga por la resistencia al cambio que supone esa pérdida, quizás nos hayan hecho más felices con la pérdida del empleo y no sepamos verlo, algo difícil cuando no llega para pagar la luz. Un abrazo enorme, y mil gracias de nuevo.

      Responder
  5. PLD
    PLD Dice:

    Fabuloso articulo Jessica! Es difícil saber de lo que se habla si no has pasado por ello. Tu amigo lo sabe bien. Seguro q nunca creyó que a él le pudiera pasar, pero pasa, vaya que si pasa!
    Todos estamos expuestos a que nos toque esa amarga lotería. Y cuando te toca, sientes miedo, terror! No encuentras sentido a las cosas que te rodean. Te cuesta levantarte por la mañana, pero lo haces porque en el fondo es tu forma de protestar, de revelarte contra esa situación, porque aun sin fuerzas, quieres seguir luchando y demostrar que, aunque lo parezca no estás muerto, que el vacío que sientes no va a doblegarte. Cuesta hacerlo, cuesta mucho, pero lo haces. Y no solo por ti, si no por los que te rodean, que de una u otra forma lo sufren en silencio a tu lado. Y pateas polígonos, y repartes CV´s y te formas, y estudias y haces kilómetros al coche pensando que es una pérdida de tiempo, pero sigues ahí. Tienes que hacerlo, no puedes darte por vencido.
    Los días pasan y las noticias no llegan… tan mal lo hago?
    Cuando pierdes una parte de ti, cuando pierdes lo que has sido, cuando pierdes tu propia autoestima, como llenas ese vacío?
    Este sentimiento indescriptible solo lo entiende quien lo ha vivido o quien realmente sabe empatizar con las personas como tú lo has hecho en este articulo, Jessica.
    Pero un buen día alguien te dice algo que aunque no lo reconoces, te ayuda a ver las cosas de distinta manera, ves un gesto de afecto y de apoyo que te cambia la visión de las cosas. Que no te devuelve al mercado laborar pero te sirve para ver las cosas desde otro prisma.
    Estoy seguro que a tu amigo le ha pasado y que desde ese día siempre le queda la terraza del Calatrava grabada en el recuerdo.
    Gracias por compartir este artículo y un fuerte abrazo y mucho ánimo a quienes están viviendo esta difícil situación.

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Alejandro, muchísimas gracias por dedicarme tu tiempo y además comentar con tanto detalle como lo has hecho. Gracias también por valorar mi actitud, la cual contemplo como algo natural y humano en las personas. Pero sobre todo gracias por exponer con tanto esmero cada situación por la que pasan (pasas?) cada día las personas en esta desagradable situación que hábilmente defines como «amarga lotería». Si tú consigue ves esperanza en esa conversación que relato, cada palabra tendrá sentido para mí y me centraré en la esperanza, como suelo hacer. Otro abrazo enorme y recordemos todos esa terraza como el punto de inflexión en esa tremenda estampa.

      Responder
  6. Miriam García M
    Miriam García M Dice:

    Hola Jessica!, Soy mexicana, y si es muy triste vivir el desempleo yo lo he vivido desde 2009, de 2013 a 2013 estuve un año sin empleo, porque efectivamente hay crisis en las empresas o también eres un peligro para tus jefes porque te ven mas inteligente que ellos y por eso me han despedido en 3 ocasiones. Emocionalmente si se siente uno muy mal, intente poner mi propia empresa y tambien fue fallida por la persona que elegi al asociarme. Cuando estas así, si necesitas que te hagan sentir bien, efectivamente la sociedad te ve como si nos sirvieras o fueras un problema de porque no dura en sus empleos y constantemente esta desempleada. Para algunos reclutadores les pareces una persona inestable y juzgan sin conocer el por que, que bueno que existen personas como tu, tan humanas y que te pones en el lugar del otro, ojala en todo el mundo existieran reclutadores como tú. Un abrazo enorme y Dios te bendiga!

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Miriam, muchísimas gracias por dedicar tu tiempo a compartir con nosotros tu experiencia. Estar en situación de desempleo ya es bastante doloroso y complejo, como para además hacer uso de comportamientos dañinos (incluso crueles) por parte de los reclutadores y como parte de la sociedad en general. ¿Qué nos queda si perdemos la humanidad? Un abrazo enorme y gracias por tus palabras, me has emocionado.

      Responder
  7. Jesus
    Jesus Dice:

    Buenas noches jessica, leer este texto en mi situación, quizás hace sentirme mucho más bajo que de costumbre, como ya sabes llevo a la espera de una cirugía grave en el cuello, desde enero, sin trabajar desde entonces y afrontando una situación aún más complicada, ya que 4 meses antes de la lesión había puesto fin a mi relación después de 8 años de convivencia muy tóxica. Lo de desvalorizarse, destruirse y sentirse lo más inútil de este mundo, es lo más fácil y lo primero que te viene a la cabeza, lo siguiente es querer quitarte del medio y dejar de sufrir y terminar con esta situación que te ha tocado en suerte, eso te ofende leerlo o escucharlo, «eres una persona con suerte», si?, eso es suerte ?. No quiero pensar que debería pasarme si no tuviese esa suerte, madre mía, me parece tan injustas esas opiniones. Me solidarizo con todas esas personas, que o no encuentran salida a sus vidas o que por lo contrario ya no quieren seguir como me está pasando a mí. Solo espero y deseo que llegue un pequeño golpe de suerte para tod@s ell@s y que vuelva la tranquilidad.

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Jesús,muchísimas gracias por compartir tu situación y sentimientos. Sé que resulta más fácil decir que hacer, pero no puede ser que la pérdida de un empleo o de una relación te hagan sentirte de tal forma, no puede ser, no lo puedes consentir. Duele, quema, cansa, sí. Nadie dijo que la vida fuese justa, pero es vida y hay que vivirla. No voy a darte consejos baratos ni hablarte de suertes en las que no creo, porque yo creo en las personas y en su valor, ese que tú crees haber perdido con el empleo, la salud o las relaciones. Tú, Jesús, sigues siendo muchas cosas, pero necesito que quien lo vea, seas tú. Un abrazo y ánimo!

      Responder
  8. Maria
    Maria Dice:

    Hola, gracias por el post. Anima bastante…yo llevo años en paro y sin dejar de formarme (tengo estudios universitarios, amplia formación, experiencia, idiomas…) pero la edad…39, juega en mi contra. La depresión de volver a casa de tus padres, no poder desarrollar una vida propia. Y lo peor de todo, la sensación de que el tiempo se va, y sentirte inservible, al fin y al cabo no tengo nada que perder, solo salud, aparentemente.
    Creo que deberían fomentar nuestra vuelta al mercado laboral, por formación y experiencia. Pero es mejor contratar gente gratis, rendimiento a bajo coste. Así es la cultura de este país. Lamentable.

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola María, mil gracias por comentar y aportar. Me alegra saber que esta reflexión sobre una historia real que representa a muchos te anima. Yo te invito a que fomentes aquello que puedes controlar, y ese es tu valor, tus objetivos, tu actitud. No tendrás fuerza todos los días ni a todas las horas, pero te ayudará a tener una rutina sana, mentalmente hablando. Y de ello dependerá, en gran medida, el salir de esa situación en la que te encuentras. Un abrazo enorme y todo mi apoyo.

      Responder
  9. SALOME
    SALOME Dice:

    Jessica buenas noches. Hace varios días que leí el post y lloré «a moco tendido». Cuenta divinamente mi situación, y si ya estaba pensando en abrir un blog, este post es el que me decidió a hacerlo, y así lo digo en el blog. Hoy mismo he empezado a moverlo.
    Me permito compartir contigo, y tus seguidores los 3 post que tiene, por ahora…..
    En el primero me presento.
    En el segundo hablo de los desempleados de larga duración
    El tercero lo he dedicado a mis logros en estos 4 años que llevo parada.

    http://baedeunamamacuarentona.blogspot.com.es/

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Salomé, me alegra saber que este post ha sido el último empujón para decidirte en escribir tu blog, a mí me costó casi 5 años decidirme!!! Si me permites, me gustaría corregir un término de tu comentario: una persona que comenta sobre sus logros, y cuenta lo que tú cuentas en tu blog, no lleva 4 años parada. Llevará 4 años sin trabajo asalariado, o sin contrato, pero ¿parada?. No creo! Esta forma de hablar y de hablarnos, hace y nos hace mucho daño. Te leeré con calma y en cuanto pueda, te comento. Un abrazo inmenso y mil gracias por compartir tu experiencia en este espacio.

      Responder
      • Mildred Bazauri
        Mildred Bazauri Dice:

        Jessica, me encanta que nos corrijas y no permitirnos decirnos «parados», porque ni siquiera en todo lo que existe en el universo hay algo que se encuentre «parado» o «detenido».

        Yo me he quedado sin trabajo varias veces y las razones han sido muy injustas para mi. Pero también me han dando la oportunidad de reinventarme.

        Gracias por abrir el blog.

        Responder
        • jessica
          jessica Dice:

          Hola Mildred, mil gracias a tí por emplear tu tiempo en comentar en mi blog y por seguirlo. La forma en la que hablamos, y mucho más en la que nos hablamos, es tan importante…. Hace tanto bien o tanto daño según como la empleemos. La palabra «parado» implica no hacer nada, estar quieto, sin moviendo. Y yo, me encuentro cada día, con personas exhaustas en la búsqueda de empleo, por salir de la situación de la están. Es decir, están en una situación, no son, por que su esencia como persona o como profesional, nunca he dejado de estar. Esa es la clave del éxito para mí en la búsqueda de empleo, a pesar, de que tarde en llegar.
          Un abrazo enorme!!!

          Responder
  10. Ignacio GG
    Ignacio GG Dice:

    Enhorabuena Jessica, lo has clavado. Has mostrado perfectamente los sentimientos por los que pasamos. Como bien indicas, el problema no es tanto económico, sino de sentirse perdido en la vida, y de que no vale uno para nada. Autoestima por los suelos. Alivia comprobar que no soy el único que pasa por este calvario. Un abrazo a todos, y ánimo para seguir luchando. «No hay mal que 100 años dure».

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Ignacio, muchísimas gracias por comentar. A todo lo complejo de la situación, siempre hay que sumar la faceta de desvalorización y daño psicológico, lo cual hace que la situación se alargue y sea más aún más dolorosa. No perder nunca de vista el objetivo es vital, y en ese objetivo, entra lo que somos, no la situación en la que estamos. Un abrazo enorme!

      Responder
  11. Sonia
    Sonia Dice:

    Enhorabuena Jessica, has dado en el clavo con la situacion por la que estamos pasando, esto se convierte en un pozo sin fondo y en el cual no se encuentra luz.
    La autoestima creo q se me perdio ya hace tiempo, me siento incomprendida en esta sociedad donde se te mira como algo extraño.
    Seguire luchando a ver si tengo suerte alguna vez.

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Sonia, muchísimas gracias por comentar en el blog. Este post me está dando muchas alegrías por muchos motivos, pero no puedo olvidar el motivo de su existencia, que es desgarrador. No sólo el hecho del desempleo en sí mismo, sino de todas las consecuencias que genera. No podemos dejar de luchar, pero las fuerzas fallan a menudo, y duele mucho más cuanto más se acercan a lo que SOMOS: PERSONAS. Un abrazo enorme!

      Responder
  12. Eli Vera
    Eli Vera Dice:

    Buenas Jessica, sentía que me habías mirado a mi, que habías hablado conmigo, estoy hace 3 años sin trabajo, describís exactamente como me siento, soy egresada universitaria en el área administrativa, el año pasado termine mi curso de docencia universitaria, tengo 42 años, hice muchos cursos asistí a charlas y continuo capacitándome en cursos relacionados a mi carrera, presente y envié tantos C.V., sin respuesta, asistí a varias entrevistas, sin lograr nada positivo, esto llevo a dudar de mis capacidades, de si estaba bien redactado mi C.V., y a sentir y ver como tantos años de experiencia y capacitación no son valorados ni tenidos en cuenta, sigo en la lucha tus palabras y las experiencias de las personas que compartieron sus vivencias, hacen que no me sienta sola y me alienta a seguir, saludos desde Paraguay

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Eli! Mil gracias por comentar en el blog. Lamentablemente he mirado a muchas personas para llegar a escribir este post, incluso a mí misma en alguna época… Nunca permitas que se te valore por algo que has elegido ser y ahora ya no eres, sea por el motivo que sea. Eso te ayudará a no desistir. Un abrazo enorme!

      Responder
  13. Natalia Mur Freixa
    Natalia Mur Freixa Dice:

    Buenas noches Jessica! Me parece genial tu post y esos agradecimientos y ánimos a las personas que están participando. En mi caso llevo un año en el desempleo y aunque por suerte estoy compatibilizando el desempleo con el trabajo por cuenta propia como autónoma, no es un trabajo regular y la situación cuesta…..y mucho. Cuesta como ha comentado algún compañero levantarse sobretodo los lunes cuando empieza la semana y cuando tu círculo se queja del trabajo que tiene y espera el fin de semana para desconectar. A pesar de que no podemos caer en la frustración y en la desolación es difícil no ser vulnerable en estas circunstancias y no poder mantener a veces esa actitud tan importante que pueden valorar en una entrevista o dejarte llevar por situaciones complicadas. Desde luego debemos rodearnos de la gente que nos quiere y no dejar que nos arrastre una espiral negativa pero es muy difícil. Yo he realizado cursos y programas de transición donde te ayudan a manejar mejor las redes sociales, cómo realizar networking, como mejorar tu CV, ya que hoy en día para una persona de más de 40 años, formada y con experiencia en alguna posición de responsabilidad no encuentra tan fácilmente un trabajo en el mercado visible; debes conseguir contactos, reinventarte y hacer lo que puedas mediante las redes para que alguien se pueda fijar en tus competencias y tu perfil. Creo que cuando nos piden ayuda lo hacemos encantados y no nos cuesta, pero distinto es «pedir para uno mismo» y a fin de cuentas tampoco pides trabajo (aunque eso sea lo que buscas), simplemente pides que gente a la que conoces te conecte con otra que igual te podría recomendar. Con esta pequeña aportación animo a los que están buscando trabajo a que no tengan miedo a «pedir» consejo, contactos, realizar networking y a los que lo tengan y puedan echar una mano que dediquen 15 minutos para escuchar el potencial de algunas personas muy válidas y que tienen dificultad para volver al mercado laboral.
    Muchas gracias!!

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Muchísimas gracias a tí por dedicar tu tiempo a comentar en mi blog, Natalia. Sé que es difícil tener los ánimos equilibrados cuando la situación se alarga más de lo deseado, cuando todo parece ir en nuestra contra… Pero si de algo han de servir estas situaciones vitales, es para que no se vuelva a repetir en cada uno de nosotros, el que nos valoremos única y exclusivamente por el puesto de trabajo que ocupamos en algún momento. Un abrazo enorme y mil gracias por tus aportaciones.

      Responder
  14. aura
    aura Dice:

    Muy interesante y aleccionador tu escrito. Aprender a conocer nuestro propio valor cuando dejamos de ser lo que hasta ayer fuimos, zona limite en la cual perdemos el norte, pero debemos volver a retomar el camino y desde el Ser, preguntarle al universo (Dios) como lo quieras llamar, como te puedo servir, dime que hacer y confiar que con nuestros talentos, vamos a encontrar la respuesta. Dios tiene un propósito para cada vida y hay que encontrarlo mas allá de una silla en una oficina, hay que soltar el miedo y volver a soñar.

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Muchísimas gracias por comentar Aura, y disculpa la demora… No podemos permitir que nuestro valor humano dependa de posiciones en empresas, de relaciones con otras personas, tenemos que buscar nuestro propósito. Un abrazo enorme y gracias de nuevo!

      Responder
  15. Susana
    Susana Dice:

    Lo has expresado a la perfección.
    Yo no soy parada de larga duración pero tengo un empleo con el que no me da para sobrevivir, comprendo lo que sienten perfectamente, pero al menos tienen ahorros o paro, hay gente que ni eso, que no saben como van a afrontar el próximo mes.Esa situación es peor todavia y si nunca la has vivido no sabrás la angustia que se siente.

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Susana! Mil disculpas por la tardanza, han sido semanas intensas… Es necesario fomentar que la identidad personal/profesional va más allá de los puesto de trabajo ocupado. Será uno de los factores claves para volver a la rueda del mercado laboral. Un abrazo enorme, Susana y mil gracias por comentar en el blog.

      Responder
  16. Gabriel Redondo
    Gabriel Redondo Dice:

    Hola Jessica,
    Intentaré no parecer una persona sin sentimientos con mi opinión. Creo que vivimos en un país con la cultura de la queja, el lamento, el porqué siempre yo, todo me pasa a mí o la culpa es de los demás. Tu post debe abrir los ojos y no hacerlos llorar. Lamentablemente he pasado por esa situación, ¡ah! y no solo una vez. Salvo en el tema de necesidades básicas o deudas, (aquí habría que estudiar cada caso) no veo un gran problema perder un trabajo. Si tienes que estar un tiempo bajando al barro, lo estás. Si tienes que seguir formándote, lo haces…no sé, recíclate, sal, busca algo diferente, lo que sea, prueba, conócete, crea algo. No es cómodo, lo sé. Se pasa mal, estoy seguro, pero el lamento y la queja solo alarga el proceso. Me cuesta creer a la gente que lleva «años» sin trabajar. En fin, creo que todo es aprendizaje en la vida y anda que no creces como persona y como profesional «gracias» a estos momentos. Tu vuelta al «ruedo» es mucho más fuerte, segura, y si por circunstancias de la vida, vuelve a pasar, te aseguro que vas a saber muy bien cómo salir de ahí lo antes posible. Mi solidaridad y respeto con todos los que buscan un trabajo, nada es seguro, pero todo es posible. ¡A currárselo! Me pegaría horas hablando de esto Jessica. Gracias! 😉

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Gabriel! Mil disculpas por la tardanza. Mi post pretende hacer reflexionar, no sé hasta dónde ni a quién, pero eso pretende. Y sobre todo a valorar el valor humano por encima del puesto a desempeñar en un momento determinado de la vida. No sé si es producto de la queja, fundada o infundada, pero si es necesario salir de ese bucle en el que estamos «busco empleo pero considero que no sirvo para nada, porque tú consideras que no sirvo para nada». Sirva para esto y para lo que cada uno considere oportuno. Un abrazo y mil gracias por tu tiempo!

      Responder
  17. Edgar Rolando Rojas
    Edgar Rolando Rojas Dice:

    Hola Jessica y a todos los miembros, una oportuna y clara declaración de titulo Lagrimas del desempleo, fuerte, duro, pero real, cuesta mucho entender y llegar al conocimiento del porque, siendo un profesional, y que le apasiona a uno sentir que le agregamos valor a nuestras familias, y sociedad en general, igual me encuentro desempleado, pero muchos por allí opinan que hay que re inventarse, tengo 52 y ya cuesta que le tomen atención a uno, mas por el nivel de empleo que uno se siente capaz de desempenar, no obstante no olvidemos que cada día DIOS nos da la oportunidad de re encontrarnos y hacer las cosas diferentes, prepararse para un nuevo capitulo, hora de prepararnos para lo nuevo, hora de levantarse con una nueva actitud, hora de tener una perspectiva nueva y fresca, y que cada día no pensemos en el tiempo que llevamos desempleados, sino que cada día cuenta para ser mejores, cuesta con los compromisos económicos, pero DIOS provee, y confió en que todos somos y tenemos un valor multiplicado, los insto a todos a luchar cada día a encontrarnos a nosotros mismos. Saludes. Edgar Rojas/Guatemala

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Edgar, mil gracias por compartir tu experiencia en mi blog. Nunca podemos perder de vista la posibilidad de crear nuevas oportunidades, por pequeñas que sean, cada día. Un abrazo enorme!

      Responder
  18. jessica
    jessica Dice:

    Hola Paula, mil gracias por comentar! Me alegra saber que mi post te ha servido para no sentirte sola en esta parte tan dura del camino, pero me gustará mucho más si quedas con la esencia. Nunca has dejado de ser madre, mujer, esposa, amiga… y eso no va a cambiar con los trabajos que tengas o con su ausencia. No sé si necesitas un psicólogo o un darte un paseo tranquila, pero obviamente eres consciente de que no es bueno para tí seguir así. Yo te aseguro que SÍ eres capaz! Un abrazo enorme!

    Responder
  19. María de los Ángeles Espínola Zetina.
    María de los Ángeles Espínola Zetina. Dice:

    Gracias Jessica, este post me ha interesado mucho. Mi esposo tiene un año sin empleo y pronto cumplirá 66años. Y esto me da más elementos para apoyarlo. Un abrazo cariñoso.

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Marigely! Mil gracias por comentar de nuevo en el blog. Me alegra saber de tu interés en la temática, dura y compleja pero también con posibilidades de superación. En estos casos, el apoyo es tan importante como la búsqueda de las herramientas más adecuadas para su perfil.
      Un abrazo enorme para ambos.

      Responder
  20. enrique
    enrique Dice:

    Como siempre un comentario lleno de dos cosas que suelen estar ausentes cuando se habla del empleo: empatía y sentido común.
    Es muy sencillo culpar al desempleado porque le falta formación, le falta capacidad emprendedora o de reinventarse.
    Leerte es un verdadero soplo de aire fresco
    Mucho ánimo

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Mil gracias por tus palabras, Enrique! Espero que también sean un soplo de aire fresco para recordar una vez que ya estemos en activo: lo que somos como persona prevalece siempre ante categorías, puestos de trabajo, organizaciones, etc. No debemos olvidarlo nunca. Un fortísimo abrazo!

      Responder
  21. Esther
    Esther Dice:

    Casi tres años después de leer por primera vez este artículo, siguen saltándome las lágrimas cada vez que lo vuelvo a leer.
    Agradecerte Jéssica tu empatía con los simples números que sacan en los telediarios.
    Emociona saber que hay personas con humanidad capaces de analizar la situación tan dolorosa en la que nos encontramos.
    En mi caso me he convertido en un simple mueble que estorba porque no aporto nada a la casa en la que vivo, la cual debería ser un hogar pero es todo lo contrario. Cada vez más infierno.
    No sé si volveré a trabajar, eso deseo , pero las esperanzas se desvanecen conforme pasan los días

    Gracias Jéssica por tu gran artículo , por tratarnos con respeto, darnos visibilidad, como personas que están pasando una pesadilla, algo que no encuentras en la vida cotidiana.

    Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Esther. Casi 3 años después de haberlo escrito, revivo lo que me impulsó a compartirlo y siento que aún seguimos valorando a las personas por los puestos que ocupan (o dejan de ocupar). Y sí, somos mucho más que la silla que ocupamos un día, la bata que llevamos o el taladro que manejamos. Mucho más, que no se nos olvide. Un abrazo enorme y gracias por hacerme revivir de nuevo.

      Responder
    • jessica
      jessica Dice:

      Hola Esther, disculpa por la tardanza en responder al comentario, se me había quedado en el SPAM del blog. Pues a mí me emociona que lo haga en ti y espero que más allá de emocionarte, sirva que nunca te olvides ni hagas olvidar a quien lo intente, que eres mucho más que lo pone una placa de uniforme o una categoría en la nómina. Todo es es útil, necesario y hasta reconfortante, pero es fugaz… Un fuerte abrazo y gracias por comentar.

      Responder

Trackbacks y pingbacks

  1. […] en algo que te hace sentir útil, valorado, respetado, no olvides que eres mucho más que una silla en un despacho y un nombre en una […]

  2. […] todo esto… pues muy fácil, después de un año de que Jessica Buelga escribiera su artículo “Lágrimas del desempleo”, después de haberlo leído y releído cientos de veces, (y sigo emocionándome en cada lectura) […]

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *